martes, 19 de enero de 2010



16 Enero 2010
Tras contemplar el panorama y ver la complicacion en general, tanto para moverse por la ciudad mochila al hombro, como para reservar billetes de tren, que por cierto estaban completos por varios dias y autobuses de locura con retrasos impredecibles, además de busqueda de hotel en cada sitio que llegaramos y durante un mes, decidimos al vernos los pelos de punta nada mas que pensarlo, cambiar la idea que traiamos de economic-free, que no tenemos veinte años y hippies ya lo fuimos, en recurrir a una oficina de turismo oficial y diseñar nuestro recorrido con su ayuda, con reservas de trenes, autobuses, taxis, hoteles...claro está, llevandose comisión.
El plan era perfecto para nuestra tranquilidad, no agobiarnos y disfrutar de nuestro viaje sin tanta incertidumbre.
A pesar de ser una oficina oficial, no privada, tuvimos que regatear, porque se subian a la parra. Al final, todo OK. a un precio razonable.
Nos recogen a las 6h. am, un taxi driver pequeño y oscuro de tez,,simpatico como todos los hindis y tras llevarnos a un barrio de chabolas y casas casi derruidas, a hacer no se que, nos invita a un "chai" (té con leche) en un puesto-chabola de la calle (bares comunes aqui), como "pa tirarte patras", la calle sin luz como boca de lobo, pero nos lo tomamos para ir inmunizandonos y seguir ambientandonos con el tema de la India.
Partimos aun de noche y con una niebla de aupa hacia Jhujhanu donde nos hospedaremos y despues visitaremos Mandawa (a 30 Km).
Volvemos a la locura de las carreteras, con su peculiar forma de conducir por ellas (son unos maestros) y que Shiva nos proteja.

2 comentarios:

Sakena dijo...

O sea, en viaje VIP?!
Mejor así... besos

ovidio dijo...

Siesque ya no somos niñosss, con chofer aunque sea cutrecillo como que mejor

Publicar un comentario